4.1.10

La primera del año

Recién se terminó el año y esta es la primer entrada del 2010.

Pasaron muchas cosas en el 2009: buenas, malas, gratas, angustiantes, deliciosas, increibles y horrendas; unas que no debería contar, otras que no quiero contar y otras que simplemente no contaré, al final las tres desembocan en el silencio, y es que si bien este año tuvo muchos sonidos, murmullos, diálogos, gritos y canciones, también hubo muchos silencios, algunos pesados, otros incómodos y algunos más necesarios.

Personas murieron, otras fueron lesionadas, lastimadas, otras no saben más de sí mismas y de otras no sabemos nada más. El 2009 fue un año como todos, el peor y el mejor a la vez por el simple hecho de haber sido en el que vivimos.

Hay mucho por contar, tanto que no sé qué es lo primero a escribir y qué lo siguiente, así que lo pensaré con calma otro tanto.

Ya iré soltando el teclado con algunas de esas cosas, y otras más, las diré sin escribirlas, sólo recordándolas.

Que este 2010 sea un año más, no el mejor ni el peor, simplemente el año en el que vivimos y acaso, en el que deberemos morir.

Albricias.